Crónica

Feminismo popular y peronismo


"No estamos en la vereda de enfrente"

La Villa 31, el conurbano, el “periconurtrava”, el corazón sojero, San Luis, Chaco: Adriana Carrasco conversó con referentes territoriales del feminismo popular sobre el voto de las PASO. El shock ante el mapa argentino pintado de amarillo, el futuro de la ampliación de derechos de mujeres y población lgtb+, el peso de la campaña política en los barrios y en la tele, la desmovilización y desmotivación como consecuencias de la pandemia y de la precarización de la vida. Las expectativas hacia las generales de noviembre.

Frente al primer escándalo del mapa pintado de amarillo, el fantasma del vuelco del voto hacia la derecha encendió otra señal de alerta: ¿cuál será el futuro de la ampliación de derechos de las mujeres y la población lgtb+? ¿Cómo votó el feminismo popular? ¿Las cuestiones de género pesaron en el resultado de las PASO 2021 en territorios donde existen activismos feministas? ¿De qué hablamos cuando hablamos de cuestiones de género en los territorios?

La Villa 31, el conurbano, los márgenes rosarinos, el corazón sojero, San Luis, Chaco: un recorrido por algunos lugares donde los feminismos populares realizan trabajo barrial y -en mayor o menor medida- dialogan con los gobernantes, muestra las particularidades del voto del último 12 de setiembre. ¿Cuánto pesó la manera de conducirse de lxs punterxs y la burocracia de escritorio, cuánto las condiciones objetivas, los malabares del día a día? 

La sorpresa del recorrido es un relato que más que la inclinación del electorado hacia la derecha describe un desencanto y una apatía que no pueden disociarse de las consecuencias de la pandemia. Un temple anímico bastante generalizado que condujo a una gran abstención electoral y alcanzó también a las bases territoriales de los feminismos populares. 

VILLA 31, RETIRO:

“ACÁ NO GANÓ MILEI”

“El feminismo en la villa es un hacer todo a pulmón, todo el tiempo. Estuvimos 8 meses repartiendo alimentos y productos de limpieza. No pudimos jugar al fútbol, con todo lo que eso implica, que no es solo el deporte y el juego grupal”, dice Mónica Santino, militante del campo popular, lesbiana, peronista, feminista e integrante de La Nuestra Fútbol Feminista, en la Villa 31 de Retiro.

La pandemia se llevó las vidas de muchas mujeres históricas del barrio. La falta de agua fue determinante en las primeras semanas de la cuarentena. 

Mónica cuenta que muchas pibas despidieron a sus madres cuando salían a hisoparse y nunca más volvieron a verlas. Es muy difícil remontar eso. Ella cree que mucha gente que hubiera votado al Frente de Todos no se movió por dolor, por desmotivación o por desánimo. 

“Estamos desmovilizados, las no-marchas, el no poder estar en la calle es un factor a tener en cuenta. Encontrarnos, vernos, es parte del ADN peronista”. agrega Mónica.

Durante la pandemia ellas fueron dique de contención, y no necesariamente por recibir ayuda directa del Estado.

Ese domingo de elecciones, a poco de comenzar el recuento de votos se instaló en las redes sociales la noticia falsa más resonante de las PASO: que la lista del libertario Javier Milei había ganado en la Villa 31. Nada más alejado de lo que ocurrió al abrir los sobres. En la Escuela Media Nº 6 Padre Carlos Mugica, para diputados nacionales triunfó el Frente de Todos con el 48,78% de los votos, seguido por Juntos por el Cambio con el 22,35%. La lista de los libertarios alcanzó el 13,18%. La participación fue de apenas el 51,42% de los inscritos para votar. 

Milei recorrió la villa junto al peluquero Rubén Orlando predicando meritocracia, muerte a los políticos y a la política, homofobia y transfobia.

Mónica Santino cree que el discurso del mediático economista tiene alcance no sólo porque se pasea por los canales de televisión más vistos, sino también, porque ese speech de “hay que terminar con este gobierno de putos y maricones” prende en algunos sectores. Son comentarios que se escucharon en la fila de votación, junto con el “me quedé sin changas durante la pandemia muerte al Estado y vamos a quemar el Banco Central”.

BARRIO MODERNO, ROSARIO:

“QUERÍAMOS VOTAR, NOS FRENÓ LA LLUVIA”

A 300 kilómetros de Retiro se encuentra el barrio Moderno. Ubicado en la Zona Oeste de Rosario, está asentado sobre terrenos fiscales del ferrocarril (como en su origen lo estuvo la villa de Puerto Nuevo-Retiro). El problema más grave que afrontan sus vecinxs son los incendios; al no tener derecho a conexión eléctrica legal las líneas de tensión son precarias y con descarga a tierra. En la Casa de la Mujer y la Diversidad milita la trabajadora de la economía popular y feminista Graciela Zenas.

“La oposición sacó más votos en estas elecciones pero no ganó en Moderno”, afirma Graciela. Cuenta que entre la gente hubo mucho “para qué voy a votar si esto no me interesa”, y que salió a relucir la bronca y la impotencia de la gente. El 10% de los votos fueron en blanco y nulos. A diferencia de la Zona Sur de Rosario, en cambio, un barrio más de clase media, acá no tuvieron tantos fallecidos por Covid. “Siempre dispusimos de agua corriente. Además,  al ser un barrio de feriantes y de gente que cirujea, nos mantuvimos con el IFE y no hubo necesidad de salir. Nosotros no tenemos plata para viajar. En Zona Sur, en cambio, fallecieron muchos sostenes de hogar.” 

Para Zenas, otro factor que evitó más muertes fue la solidaridad y la concientización sobre los cuidados. “Aquí nadie apedreó a los que se contagiaron.” Las personas se aislaban y con ayuda del club eran asistidas con alimentos y artículos de limpieza. Hicieron mucho para alentar el voto en las PASO, cuenta, “pero nos arruinó la lluvia”. Diluvió esos días, para alivio del Río Paraná. “No escuché para nada enojo por los temas de género que promueve el gobierno nacional”, sintetiza Graciela Zenas.

El nivel de participación en Moderno fue parecido al de la villa 31, 53,73%. Ganó el Frente de Todos por el 48,91%, Juntos por el Cambio obtuvo el 19,15% y el tercer lugar fue para el Frente Amplio Progresista, con el 12,79% (para diputados nacionales). En la Zona Sur de Rosario, tomando por caso el barrio Tiro Suizo, los resultados fueron al revés. Juntos por el Cambio se impuso por el 32,28%, contra el 29,96% del Frente de Todos y el 16,11% del Frente Amplio Progresista. La participación fue del 58,88%.

LA MATANZA, GBA:

LA JEFAS DE HOGAR DESMOTIVADAS 

En cada territorio, la militancia feminista se manifiesta de manera diferente. En los barrios de La Matanza, una particularidad es la gran cantidad de mujeres que profesan la fe evangélica pentecostal. ¿Se las considera dentro o fuera de los feminismos populares según su posición frente al aborto?

Analía Iraola es feminista popular y militante peronista en Todxs Somos la Patria, conocida por su trabajo territorial y por “poner el cuerpo”. Ella entiende que hay un feminismo popular que no está representado en el Frente de Todos. Y que dentro de ese feminismo están las jefas de hogar que en su mayoría son evangelistas. “Ellas están en primera línea. Por ejemplo, cuando hay una compañera golpeada o alguien necesita asistencia concreta. Por eso nosotrxs incluimos a todxs en el feminismo. Estas compañeras también manifiestan que están en contra del aborto, pero te pueden llamar a las 3 de la madrugada si alguna precisa ayuda para abortar. Hay que tener empatía con la realidad de esas mujeres, escuchar por qué opinan eso y estar también para ellas. Yo voy a los centros evangélicos con pañuelo verde, pero tenemos que aprender a escuchar, porque si no es la grieta de la grieta.”

Analía Iraola pone el acento en desmovilización y desmotivación para explicar el bajo resultado del Frente de Todos en las PASO. Durante la crisis por la pandemia nunca le atendieron el teléfono, pero la llamaron para fiscalizar. “No podés estar tres meses para que te manden chapas, para que una compañera que sufrió violencia se arme una casilla. Muchas compañeras se anotaron en el programa Acompañar -para víctimas de violencia de género- y no lo cobran porque dicen que no son de riesgo alto. Y muchxs compañerxs que tenían el programa Potenciar dejaron de cobrar por una falla administrativa del ministerio”, señala. 

En La Matanza ganó el Frente de Todos por el 46,05%, contra 27,25% de Juntos. Tercero resultó el Frente de Izquierda y de Trabajadores con el 7,49%, y los libertarios apenas consiguieron el 4,90%. Los porcentajes son para la categoría concejales. La participación fue del 62,28%.

Iraola puntea una larga lista de razones para esa desmotivación de las jefas de hogar. Al tope se encuentran las condiciones objetivas: un alquiler en una villa no baja de entre 12 y 16 mil pesos; la clase media para mudarse a un tres ambientes en Isidro Casanova precisa de movida 100 mil pesos. ¿Quién los tiene? La gente trabaja 16 horas para mantenerse. “En los comedores, lxs compañerxs que cobran 14 mil pesos de un programa ponen 2 mil todos los meses para comprar alimentos frescos. Se compran alitas de pollos, y con un cajón de alitas no hacés nada. Nosotrxs avisamos para que no ocurra lo de las PASO, no estamos en la vereda de enfrente. La gestión de Daniel Gollan fue excelente, ningún hospital colapsó y tuvimos vacunas, pero no es lo único. Y sigue habiendo funcionarios del macrismo atornillados en el poder.” 

PERI-CONUR-TRAVA:

“EN NOVIEMBRE TENEMOS QUE DAR VUELTA LA TORTILLA”

El periconurbano comprende los municipios donde las ciudades son contiguas a las zonas rurales y de quintas, más allá del segundo cordón del Gran Buenos Aires. Alessandra Luna, artivista peri-conurtrava, sostiene que la realidad en estos territorios es muy diferente de la del conurbano bonaerense. Su militancia/activismo se desarrolla en el partido de Presidente Perón.

“Fue una sorpresa el resultado de las PASO. Nos dio miedo y angustia. Pero será cuestión de resiliencia y de dar vuelta la tortilla para las elecciones de noviembre.” Alessandra siente que entre ellas hay mucha despartidización, cansadas de que las usen para la foto, eso que en broma llaman “mascotismo”. Pero ese paradigma viene cambiando. Por ejemplo, la municipalidad las invitó a proponer y hacer. 

Los resultados no fueron adversos para el Frente de Todos en Presidente Perón. La lista promovida por la intendenta del Frente Renovador se impuso con el 33,72%, seguida por Juntos con el 20,63% y en tercer lugar el partido vecinal que formó el antiguo intendente del Partido Justicialista, con el 18,42% (categoría concejales). La participación fue del 63,40%.

“En el periconurbano, el caudillismo no es exclusivo del Frente de Todos. Por suerte en Presidente Perón hubo internas. Personalmente, adoro tanto a Cristina como a Alberto Fernández. Alberto tiene una gran representatividad al ser padre de une chique disidente, pero el camino estuvo abierto para el colectivo lgtb desde los años en que gobernó ella. El problema en el periconurbano es que mucha gente que acompaña los espacios de Cristina no la sigue en sus políticas lgtb. Hay muchos pecheadores. Mi corazón está ahí, pero les compas tienen que padecer a punteres que están en los territorios y son reviolentos. Yo les diría a esos pecheadores: ‘Miren a Cristina, ahí tienen un modelo para seguir’”, manifiesta. 

ESPERANZA, SANTA FE:

TREMENDA DERROTA EN EL CORAZÓN SOJERO

Un panorama muy diferente se vive en el corazón de la Patria Sojera. La ciudad santafesina de Esperanza, la más antigua colonia gringa de la Argentina y cabecera del departamento Las Colonias está gobernada desde hace 14 años por una intendenta del Partido Justicialista. Tremenda derrota del Frente de Todos, con el 29,13% de los votos contra el 40,11% de Juntos por el Cambio (categoría diputados) y el 10,82% del Frente Amplio Progresista. La participación fue del 64,04%.

En Esperanza vive y milita en el peronismo Marisa Ramos, una histórica del feminismo desde finales de los 80s, aunque nunca cultivó alto perfil. Cuenta que su ciudad nunca dejó de ser “una colonia de gringos”. Hoy existen industrias muy desarrolladas, pero el modo de ser está aferrado al catolicismo. Una forma de reforzarse como conservador es mostrarse antifeminista y refractario frente a las conquistas del colectivo lgtb, todo eso incluido dentro del antiperonismo. “No te van a comentar nada si te oyen hablar en lenguaje inclusivo, a menos que haya confianza. En ese caso te contestan ‘no vengás con esa pavada’. Por supuesto que en los ámbitos militantes es diferente. Hay una colectiva feminista muy importante, Se Dice de Mí, pero se las ve difícil por varios factores”, explica Marisa Ramos. 

Las marchas contra los femicidios tienen sus peculiaridades en Esperanza. Prefieren las marchas del silencio, que cuentan con el apoyo del colegio católico San José. “Una de las candidatas triunfantes en la lista de Juntos por el Cambio se hizo famosa por irrumpir en una marcha donde las organizadoras reclamaban políticas públicas de género. Esta mujer, comerciante, salió a gritar y a pedir ‘silencio, por respeto. No hay que mezclar la política en esto’. Se presenta como antipolítica y fue candidata.”

RESISTENCIA, CHACO:

“LAS COMPAÑERAS SE FUERON ALEJANDO”

Fue un shock la derrota del Frente de Todos en Chaco también para María Elena Romero, activista lesbiana y feminista de Resistencia. “También fue una sorpresa que la lista de Juan Carlos Bacileff Ivanoff, lo más rancio de la derecha peronista, se constituyera en tercera fuerza sin haber hecho campaña más allá de unos carteles. Su gobierno se hizo conocido por reprimir y apelar a la ‘mano dura’. En ese voto pesa la prédica antiderechos y el racismo contra los pueblos indígenas, con sus barrios separados del centro de la ciudad.” Entiende que a Jorge Capitanich le jugó en contra “la tibieza” frente a los reclamos sociales, y un techo de cristal difícil de romper para las feministas de las bases del peronismo. “Las compañeras se fueron alejando. Pero los resultados dan susto. Vamos a organizarnos para revertirlo.”

Los resultados en el departamento de San Fernando, que incluye Resistencia, fueron del 43,60% para Chaco Cambia + Juntos por el Cambio, 28,83% para el Frente de Todos, y 13,65% para el Frente Integrador de Bacileff Ivanoff (para diputados nacionales). La participación fue del 64,19%.

SAN LUIS:

¿DÓNDE ESTÁ GUADALUPE?

En San Luis, el resultado de las PASO fue un mazazo para el gobernador Alberto Rodríguez Saá. 

Noelia Aguilar, activista feminista, dice que el diálogo del movimiento con el gobierno provincial es bueno, que el gabinete se manifiesta progresista respecto de las demandas feministas y lgtb. “Pero después de 40 años, empezó a pesar el maltrato de quienes coordinan los planes sociales provinciales, sostenidos en la precarización laboral y la violencia de los juegos punteriles.” 

Rodríguez Saá no articuló con las organizaciones peronistas, especialmente con La Cámpora, que en la provincia es una orga chiquita pero tiene mucha llegada cotidiana y sensibilidad social. El proyecto educativo de las escuelas chárter, que organizó para frenar las revueltas docentes de 2014, generó puestos de trabajo precarizados e impidió -e impide- la agremiación docente. 

“En San Luis no hay hambre, no ves la pobreza que abunda en las grandes ciudades del país. Pero aquí lo simbólico cuenta mucho y como no hay tercera opción, pesa la derecha”, explica Aguilar.

Además, según Noelia, la desaparición de la niña Guadalupe Lucero Cialone puede haber tenido peso en la derrota. Dos días antes de las elecciones, Rodríguez Saá recibió a Yamila, madre de Guadalupe. El mensaje de ella en Facebook luego de la reunión fue “Hoy me recibió el gobernador. ¡Espero cumpla! Igual mi voto no cambia en nada”. El día de las PASO, posteó “¿Dónde está Guadalupe? #YoVotoNulo #FaltaTehuel #NoHayJusticia”.

En la provincia se impuso por el 46,92% Unidos por San Luis, del ex gobernador Claudio Poggi (hoy integrante de Juntos por el Cambio) contra el 37,36 % de Fuerza San Luis, la lista oficialista. Los votos en blanco y nulos sumaron un 6%. La participación fue una de las más altas en estas PASO, 68,97%.